¿Existe algo más emocionante para un niño que descubrir un portal a un mundo de fantasía donde habitan hadas, faunos y leones que batallan malvadas brujas? Tal es la premisa de Las Crónicas de Narnia: El León, la Bruja y el Ropero, versión de la saga de 7 libros de C.S. Lewis.
Cuatro hermanos ingleses son evacuados a la campiña durante los bombardeos en la Segunda Guerra Mundial. En la casa de un pariente lejano los niños Pevensie descubren un ropero oculto en una habitación. Como Alicia en el País de las Maravillas, el ropero es el portal hacia un mundo mágico llamado Narnia.
La llegada de los Pevensie a Narnia desata una guerra. Por un lado la malvada Bruja Blanca desea continuar su dominio total; por el otro, un león-mesías llamado Aslan lidera a los rebeldes junto a los Pevensie a una cruzada para restaurar Narnia a toda su majestuosidad pasada.
La temática de Narnia está cargada de alusiones a la teología cristiana. A pesar de ser comparada con épicas al estilo del Señor de los Anillos, Narnia pareciera tener más en común con El Mago de Oz y Peter Pan, donde los niños escapan del realismo y el pesimismo para vivir aventuras grandilocuentes.
El director Andrew Adamson (Shrek) construye una historia envolvente que impulsada bajo las actuaciones de su joven reparto y el toque mágico de los efectos especiales parecieran garantizar a esta nueva saga un futuro dentro de los nuevos clásicos familiares.
Comentarios
PD.- por pura "flojera" escribí en castellano, avísame si debo hacerlo en inglés.
En especial esta nos recuerda lo grande que es la imaginación, que existe un mundo lleno de maravillas, que debemos tenerlo presente y no amargarnos en lo cotidiano.
Me encanta ver todas las películas the Walt Disney